Una resolución obligaba a Batet a convocar la Mesa para corregir el voto erróneo y se negó a cumplirla
Pedro Sánchez ha conseguido sacar adelante su reforma laboral sin el apoyo de sus socios. Lo ha hecho gracias a un voto equivocado del PP: el voto decisivo. Pero lo cierto es que la normativa del Congreso permite la corrección a tiempo de esos votos erróneos y Batet se negó a convocar la Mesa tras solicitarlo el PP. Batet, de ese modo, decidió unilateralmente una negativa a aceptar la corrección del voto erróneo, hurtando a la Mesa de esa decisión.
El PP reclamó corregir el voto en tiempo y forma. Pero la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, le negó ese derecho y sumó el voto equivocado y decisivo para que la reforma laboral de Pedro Sánchez obtuviera el respaldo de la Cámara.
Las imágenes captaron en plena bronca parlamentaria a Batet afirmando que no podía dar la palabra a la portavoz popular, Cuca Gamarra, para debatir sobre el sentido del voto equivocado porque esa era una decisión “de la Mesa”. Y, efectivamente, así es. El problema es que ella se negó a convocar la Mesa tal y como exige la normativa del Congreso.
Los populares, como ya ha mostrado OKDIARIO en un vídeo, acudieron a Meritxell Batet para que convocara la Mesa y debatiera la necesidad de corregir el sentido del voto erróneo, el emitido por el diputado del PP Alberto Casero. Lo hicieron antes de que comenzara la votación del Pleno, por lo que se estaba a tiempo de subsanar el error. Pero la presidenta del Congreso se negó a llamar a la Mesa para debatirlo y adoptó unilateralmente el criterio de no enmendar el error.
Decide la Mesa, no Batet en solitario
La norma determina claramente la necesidad de corregir el error y de hacerlo pasando por la Mesa. No por la decisión unilateral de la presidenta. La Resolución de la Mesa del Congreso de los Diputados de 21 de mayo de 2012 para el desarrollo del procedimiento de votación telemática, recuerda que el “Pleno del Congreso de los Diputados, en su sesión del día 21 de julio de 2011, aprobó una reforma del Reglamento del Congreso de los Diputados, por la que se modificaban los artículos 79 y 82, con el objeto de permitir la votación no presencial de los diputados en supuestos tasados y con la debida autorización de la Mesa de la Cámara”. Y que “en virtud de la Disposición final primera de la citada reforma, la Mesa del Congreso de los Diputados, con el objeto de poner en práctica el procedimiento contemplado en la citada reforma, acordó, en su reunión de 21 de mayo de 2012, exigir las siguientes cautelas.
Ninguna se ha cumplido en este caso: en su punto cuarto, señala que “tras ejercer el voto mediante el procedimiento telemático, la Presidencia u órgano en quien delegue, comprobará telefónicamente con el diputado autorizado, antes del inicio de la votación presencial en el Pleno, la emisión efectiva del voto y el sentido de este. Una vez verificados dichos extremos, el voto telemático emitido se trasladará a la Presidencia al inicio de la votación presencial en Pleno para que pueda anunciar el resultado acumulado de las votaciones”.
Pero es más, en su punto sexto, la Resolución citada señala que “el diputado que hubiera emitido su voto mediante el procedimiento telemático no podrá emitir su voto presencial sin autorización expresa de la Mesa de la Cámara que, en el supuesto en que decida autorizar el voto presencial, declarará el voto telemático nulo y no emitido”. Es decir, que era la Mesa la que tenía que decidir y no Batet sin contar con nadie. Pese a lo que tomó la decisión de forma unilateral.
A partir de ahí, el vídeo reproducido ya por OKDIARIO prueba como la portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Cuca Gamarra, reclamó ante Batet la corrección del voto equivocado, tal y como permite el reglamento de la Cámara. Lo hizo antes de que diera inicio la votación, tal y como regula esta misma normativa. Y, pese a ello, Batet se negó.